Tener un animal de compañía en casa es una gran responsabilidad, ya que ya se trate de un perro o de un gato tendrás que estar pendiente de su alimentación, estado de salud y felicidad. Sin embargo, lo cierto es que no todos los animales requieren los mismos cuidados. Y como no todos son iguales, hoy vamos a centrarnos en unos muy concretos: los gatos.
Sin embargo, no lo haremos para hablar sobre cuáles son los cuidados para que tu gato sea saludable. En vez de eso lo que haremos será contarte cuáles son los motivos por los que deberías castrar a tu gato, tanto si es macho como si es hembra. De modo que si tienes un gato y te habías planteado si debías castrarlo o no, te ayudamos a salir de dudas con esta nueva publicación.
¿Cuáles son las ventajas de castrar a tu gato?
Castrar a tu gato es una de las decisiones más importantes que deberás tomar como su propietario. Y lo cierto es que se trata de una decisión totalmente aconsejable para su salud. Esto es así debido a que evita el riesgo de embarazos no deseados y también reduce la posibilidad de que el animal contraiga enfermedades. Desde nuestro punto de vista las ventajas de castrar a un gato pueden reducirse en dos grupos: a nivel físico y en su comportamiento.
A nivel físico
Si hablamos de hembras, gracias a la castración se elimina el riesgo de que puedan sufrir enfermedades relacionadas con el útero y los ovarios. Además, también se reduce el riesgo de otras enfermedades producidas relacionadas con las hormonas como falsos embarazos o el cáncer de mama. Por otra parte, en los machos elimina el riesgo de sufrir enfermedades relacionadas con los testículos y reduce el riesgo de enfermedades inducidas por la testosterona. Y ya sean machos o hembras evitan la propagación de enfermedades de transmisión genética y la frustración sexual.
En el comportamiento
Si hablamos del comportamiento de los gatos, la castración también ofrece beneficios. En este sentido vamos a diferenciar claramente entre hembras y machos:
- En machos: reduce la posibilidad de que el gato orine donde no debe y de que presente comportamientos territoriales. Además, reduce la tendencia de que puedan irse lejos de casa.
- En hembras: reduce el interés en los gatos machos, así como la propensión a mostrarse agresivas o excesivamente afectivas.
¿Cuándo es mejor castrar a tu gato?
Lo más probable es que conocidas estas ventajas tus dudas sobre si castrar o no a tu gato hayan desaparecido. Si es así, lo más seguro es que quieras conocer en qué momento deberías recurrir a la castración. Por norma general lo más aconsejable es realizarla antes de que la mascota llegue a su madurez sexual. En el caso de los machos, suele recomendarse hacerlo en torno a los 5 meses de edad. En las hembras, por su parte, lo ideal es hacerlo antes del primer celo, entre los 6 y 8 meses de vida.
La castración es una operación importante, aunque bastante rutinaria. De hecho, el riesgo de que puedan surgir complicaciones es realmente bajo. En la mayoría de casos, salvo que surjan complicaciones, lo normal es que puedas llevarte a tu gato de vuelta a casa el mismo día de la intervención. Además, los puntos puede que no sean visibles, lo que hará más sencillo todo el proceso de curación.